Ignacio Calderón

Julio 20, 2022


Ignacio Calderón: “Lo que me interesa es cómo plantear todas estas ecuaciones que modelan y describen la dinámica del fuego y cómo podemos resolverlas de manera eficiente en el computador”.

Ignacio Calderón: “Lo que me interesa es cómo plantear todas estas ecuaciones que modelan y describen la dinámica del fuego…”

Ignacio Calderón, estudiante del Doctorado en Ciencias de la Ingeniería área Ingeniería Mecánica de la Universidad Católica, fue uno de los 30 expertos seleccionados de todo el mundo en participar por una semana de los cursos de verano del Centro de Investigación Forschungzentrum Jülich en Alemania, una de las instituciones más prestigiosas de Europa, con más de 60 años realizando investigación interdisciplinaria sobre la base de las competencias de la física y la supercomputación.

Ignacio junto a los expertos de distintas partes del mundo que participaron en el curso de verano del Centro de Investigación Forschungzentrum Jülich en Alemania.

Todo esto tras obtener la Beca Doctorado del Centro Nacional de Excelencia para la Industria de la Madera (CENAMAD) gracias a su proyecto de tesis, el que cuenta con la supervisión del investigador asociado de la Facultad de Ingeniería UC, Wolfram Jahn, y que estudia la dinámica que se generan en edificios de madera durante los incendios, particularmente, a través de simulaciones en el computador.

“Tanto en Chile como en el mundo, no hay protocolos ni requerimientos para construir en edificios de altura en madera y es muy diferente cómo se comporta un incendio en un edificio de concreto, que en uno de madera. Lo que yo intento simular es una vez que se logró apagar el incendio qué tan posible es que con una mínima tasa de aire pueda volver a flamear el edificio. Cuál es la probabilidad que esto pase y cuáles serían las consecuencias”, comparte Ignacio.

Gran oportunidad para su carrera

La experiencia de estar en el Centro Forschungzentrum Jülich fue clave para el proyecto de Ignacio, ya que le permitió conocer, de forma cercana, el desarrollo del software Fire Dynamics Simulator (FDS), herramienta que simula la dinámica de un incendio en edificios de madera. Tener clases con los expertos que desarrollaron este programa y ver los supercomputadores que existen en este centro. “Nos dieron una clase para entender el trasfondo de estos softwares, porque si bien yo ocupo el programa como una herramienta para resolver los problemas, por atrás también nos enseñan cómo actúa este software, cómo se resuelven todas las ecuaciones y en base a eso, podemos determinar los parámetros que necesitamos saber”, explica.

La semana de clases en esta escuela de verano transcurrió con 6 horas diarias. Una de las que más recuerda Ignacio fue la que le impartió Emanuele Gissi, jefe del Servicio Nacional de Bomberos y Rescate de Roma, Italia. “Él usó otro software para hacer la geometría en las estructuras, tomó este software (el FDS) para resolver incendios y los unió. Lo que nos mostró es que es posible diseñar el edificio por sí solo, con una interfaz gráfica que sea amigable y aparte, se puede exportar esta geometría, juntarla con el otro software y ver en tiempo real, de manera mucho más simple, cómo el incendio se va desarrollando”, cuenta el estudiante de doctorado.

Ignacio destaca que instancias como éstas son muy relevantes para los investigadores y sobre todo para quienes inician sus vidas como investigadores. “Estas experiencias no sólo aportan conceptos y fortalecen habilidades, si no que también te dan la posibilidad de realizar networking con personas que están trabajando en temas similares a los tuyos y poder aprovechar esta sinergia para colaborar en un futuro”, agrega.

El proyecto que desarrolla Ignacio estudia la dinámica que se generan en edificios de madera durante los incendios, a través de simulaciones en el computador.

Calidad académica UC

“Me sorprendió ver lo bien preparado que estaba para lidiar con esta experiencia. En temas de conocimiento, las carreras en Chile son mucho más específicas que en Europa, donde son mucho más generales. Entonces, los cursos que yo tuve que hacer para obtener mi título de Ingeniero Mecánico, ellos los tuvieron que hacer para su magíster. No tenemos nada que envidiarle a otros países, incluso a nivel de académicos, podemos decir que estamos a la altura con ellos en estos temas”, destacó Ignacio.

Con 25 años, el interés de Ignacio por la ciencia surgió desde muy pequeño cuando supo que la ingeniería mecánica era lo que quería estudiar. “Siempre fui bien tuercas, pero me gustaba mucho la Física. Si bien no era el ramo más fácil que se me daba, en algún minuto pensé en estudiarla, pero como tenía un hermano que es astrónomo, me recomendaron que estudie ingeniería con la opción de a futuro especializarme ya sea en Astronomía o Física”, comparte.

Han pasado 8 años desde que ingresó a la Facultad de Ingeniería a hacer su pregrado, después su Magíster en Ingeniería Mecánica, donde desarrolló un simulador de pulmón mecánico en plena pandemia, y ahora su doctorado, el que recién lleva cursando un semestre. En la actualidad se denomina un “adicto a la universidad”, a la que asiste sin falta todos los días para trabajar con los más recientes artículos científicos, interactuar con los expertos de su departamento, comentar investigaciones y seguir desarrollando su proyecto de simulación de incendios en edificios de madera.

“Con mis amigos entramos todos a la universidad el mismo año, somos todos compañeros de ingeniería, pero todos nos dedicamos a distintas áreas y yo soy el único que seguí un programa de doctorado”, destaca.

Han pasado 8 años desde que Ignacio ingresó a la Facultad de Ingeniería UC para estudiar su pregrado, después su magíster y actualmente está en el primer año de su doctorado.

Para Ignacio, el cursar un doctorado y desarrollar más aún el conocimiento en esta instancia académica es una aventura. “Te permite estar a la vanguardia, conocer otras realidades de la ciencia y ver qué se está haciendo en otras partes del mundo. Si uno está dispuesto a aprender cosas nuevas, a vivir un poco en la incertidumbre durante un tiempo, conocer a investigadores de otras partes del mundo, otros softwares, estar a la vanguardia del conocimiento creo que es algo super valorable y particularmente no sé si te lo podrá dar otro trabajo”, comenta.

Ignacio comparte que, a futuro, le gustaría desarrollar una carrera en la academia, ligada con la investigación. “He sido ayudante en distintos cursos de la facultad. Explicarle a otra persona y que a ésta le haga click lo que le enseño es gratificante, ser docente e investigador es lo que me gustaría hacer”, concluye.

Entramado